martes, 19 de agosto de 2014

Para los que se dejan influenciar por los demás


La influencia que ejercen sobre nosotros desde niños puede ser tan positiva muchas veces como negativa muchas otras: padres, madres, maestros y mayores desde niños nos están influenciando para ser mejores personas, lo deciden todo por nosotros, lo que es normal hasta cierta edad. A partir de una edad, cada uno tiene la suya propia, nosotros deberíamos empezar a tomar las riendas de algunas decisiones. Esta es una manera de conseguir cierta independencia, que protegerá a la larga nuestra propia autoestima. Si no conseguimos esa autoestima, si no creemos que seamos tan buenos como los demás, si nuestras ideas son siempre desdeñadas, nuestros valores desvalorizados, al final nos creemos incapaces de afrontar nuestra vida solos, puesto que nos falta seguridad y confianza en nosotros mismos.

Tener independencia no es solamente ser solventes el plano económico, sino también en el plano emocional. Muchas veces, estas personas sienten que van a defraudar a los seres queridos o se sienten rechazados por ellos. Mientras sintamos esos miedos, no seremos independientes emocionalmente. Debemos hacer y pensar un poco por nuestra cuenta, lo que nos gusta, lo que nos mueve, lo que creemos. No podemos bailar al son de los demás, porque entonces no bailaremos nada.

 
Agrimonia: Por no discutir renuncian a muchas cosas. Son personas alegres y joviales. Generalmente se les considera buenos amigos, pero se reservan sus penas tras un gran humor. Muchos toman alcohol o drogas para estimularse y llevar su carga con humor.
Son los payasos tristes, llevan una máscara de despreocupación aunque estén profundamente turbados. La ansiedad y angustia que sufren suele ser porque piensan que deben amoldarse a lo que les pasa y por tanto intentan restarle importancia y el hecho de no querer discutir suele ser para no acabar hablando de sus problemas.



Centaura: Son excesivamente serviles para agradar a los demás. Suelen desvivirse por los demás, sobrestimando sus propias fuerzas. Suelen ser personas tranquilas, tímidas y de poca personalidad, lo malo es que a menudo los demás se acaban aprovechando de ellos. Todo esto les acaba agotando, ya que dan siempre prioridad a las necesidades ajenas antes que a las propias, y por los demás acaban dejando de lado también su misión vital.



Nogal: Personas que tienen las cosas muy claras, pero se desaniman fácilmente. Sus objetivos tienen una importancia vital para ellos, pero son capaces de apartarse del mismo si el otro tiene una personalidad más fuerte, o incluso en algunos casos si considera razonable lo expuesto por la otra persona, les cuesta seguir con sus ideas sin pensarlo siquiera. Hay que destacar que a estas personas no les agradan los cambios de ningún tipo.




Acebo: Sufren de celos, odio, ira y envidia del éxito de los demás, sin que exista ningún tipo de motivo. La mayoría de las veces consideran a los demás más guapos, mas listos y más capacitados por definición, por lo que siempre recelarán de compañeros del trabajo, o de amigos de sus parejas, aunque realmente no haya ningún motivo para ello. Tienen una muy baja autoestima que les hace sospechar de todo y todos. Sienten envidia de los que han tenido mas éxito que ellos, sin pensar si ese éxito es merecido.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tus comentarios